Un amor inesperado.
Capitulo 8 una noche de desengaños.
Después de haber pactado con Luisa, Miranda Elroy fue directo a la casa, donde ya se servía la comida y todos se encontraban reunidos en el comedor, se encontraban sentados los White incluida Candy y los Cornwell, Patricia y Archivald, la tía abuela entro en el comedor, el cual se sumió de inmediato en un silencio en que solo se limitaban a comer, todas las risas y bromas se habían esfumado, la tía abuela se disculpo por llegar tarde a la comida y observo que candy estaba presente en el comedor por lo que supuso que Dorothy la había dejado salir de su habitación por lo que no le dio importancia al asunto.
Después de la comida ordeno que todos se prepararan para salir en dos horas a la casa Leagan, por lo cual los Cornwell se marcharon ya que ellos también estaban invitados.
Candy fue llevada a su habitación donde Dorothy y Charlotte, la preparon para la fiesta, le ajustaron un poco mas el corsé para definir aun mas su delicada silueta y la forma de sus pechos para crear un buen escote, usaría el vestido verde con engastes de piedras pequeñas que llevaba alrededor de los hombros, que le había regalado el mocoso engreído, usaria sus zapatos de terciopelo verde, en el cuello llevaría una delgada cinta de terciopelo negro de la cual pendía un pequeño dije de perlas y en el centro llevaba una esmeralda, este había pertenecido a su madre, y el cual hacía juego con los aretes de esmeralda que le había regalado su padre antes de morir.
Su cabello fue recogido por unas horquillas de plata solo dejando sueltos unos pequeños rizos que enmarcaban su rostro, llevaría los hombros desnudos solo en parte ya que el clima estaba un tanto frio por lo que llevaría una estola de cachemira negra, dorothy coloco en su mano un abanico nuevo negro, candy estaba lista para la fiesta, y a tiempo.
Annie también estaba lista por lo que fue a la habitación de candy, pero al entrar se quedo boquiabierta, Candy lucia, no, no lucia, brillaba por su belleza. Después de Annie entraron en la habitación Albert y Stear que ya están listos en sus trajes de gala, también se quedaron maravillados con la apariencia de Candy que solo la describieron con una sola palabra.
-¡hermosa!
Candy no pudo evitar sonrojarse ante los comentarios y miradas de sus hermanos que lucían apuestos en sus trajes de gala, Albert recogió su cabellera en una coleta negándose a cortarse el cabello y Stear luciendo un impecable corte de cabello, Annie lucia preciosa en su vestido azul turquesa, pero tan pronto como percibió la mirada de la tía abuela se puso tensa e irguió la cabeza, esperando un comentario a cerca de el arreglo que le habían hecho dorothy y Charlotte.
La tía abuela la observo detenidamente, antes de dar el veredicto.
-bien, Candy luces muy bien.
Dorothy y Charlotte respiraron aliviadas de haber cumplido el objetivo de embellecer a candy, no hicieron demasiado por ella, ya que la rubia poseía una belleza natural.
-bien debemos irnos, no es decoroso hacer esperar a nuestros anfitriones.
Diciendo esto Albert seria la escolta de Candy y de la Tía abuela, mientras que Stear escoltaría a Annie hasta que se presentara Archie, el escoltaría a Patricia el resto de la velada.
Ya dentro del carruaje Candy le pidió a Albert que no la dejara sola, ciertamente sabia que pronto se marcharía con Anthony, pero no quería estar cerca de Neal Leagan.
Llegaron a la casa Leagan, donde fueron llevados al salón principal, cuando las chicas White, hicieron su entrada acapararon todas las miradas, en especial candy, que a su lado Annie palidecía que aun que era bella, no podía compararse a Candy cosa que no le importaba ya que creia tener toda la atención de unos ojos avellana que la esperaban al pie de la escalera, los cuales la miraban llenos de amor y eso bastaba para Annie, Neal creía que ya estaba mas que ebrio por que al ver a candy pensó que era un ángel, o una visión de una diosa griega.
Eliza no podía creer que Candy White la opacara en su propia casa y en su fiesta, la odiaba, quien era ella para hacerla quedar en ridículo, ella no era nadie, ella era la que tenia mejor estirpe, mejores modales, mejor posición, pero aun así no lograba atraer la atención de tantos hombres como lo hacia Candy esa noche y ahí estaba el idiota de su hermano embelesado mirando a Candy que bajaba del brazo de Albert, sin duda no sabia lo que tenia que hacer para meter a ese hombre a su cama pero lo haría sin importar el costo, ya muchos eran los habían caído en sus encantos ni el ni Anthony Brower serian la excepción.
Eliza se acercaba a dar la bienvenida a la familia White, con una sonrisa maliciosa en el rostro. Neal seguía embobado mirando a candy desde el otro lado del salón, tal vez si estaba demasiado ebrio aunque apenas eran 7 de la noche.
-!Candy! querida luces formidable, que hermoso es tu vestido.
-gracias Eliza también luces muy hermosa esta noche.
-Albert querido, no sabia que habías regresado de tu ultimo viaje, tan apuesto como siempre, te hare el honor que seas mi escolta esta noche, que dices?
-lo siento Eliza será en otra ocasión, hoy seré la escolta de candy, ya que no tiene acompañante.
Albert estaba en problemas y lo sabia por la cara de disgusto que hizo la tía abuela por el desaire que le hizo a Eliza, pero no se alejaría de candy en toda la noche.
Eliza se alejo para seguir incomodando a los invitados, tratando de darles la bienvenida, su lengua era como la de una víbora ponzoñosa, solo escupía veneno, aun que solía parecer un tanto inofensiva.
Ya había transcurrido la mitad de la velada y aun no había hecho acto de presencia el invitado de honor, por lo cual Eliza estaba mas que furiosa y un humor insoportable, pero su humor mejoro ligeramente cuando vio que llegaba Anthony Brower, pero este no se detuvo a presentar su saludos ya que se dirigía directo hacia candy, esto enfureció mas a Eliza.
Anthony se encontraba a unos cuantos metros de Candy, estaba maravillado, lucia más que hermosa, cuando Candy logro verlo sus ojos brillaron y le regalo una sonrisa deslumbrante, Anthony le hizo un movimiento con la cabeza para indicarle que saliera a la terraza.
Lo que ninguno observo es que unos ojos grises, no se despegaban de Anthony desde que había entrado al salón y poco a poco se acerco a el y salió de tras de el a la terraza del jardín.
Anthony esperaba ansioso a que candy saliera a la terraza para poder fundirse en sus ojos verdes, y poder besarla y...
-podrías ayudarme no me siento muy bien.
La voz lastimosa y débil de una chica, había interrumpido sus pensamientos, no podía ignorarla, era un caballero despues de todo, por lo que se apresuro a sujetarla por la cintura cuando noto como si esta se fuera caer y golpearse contra el piso.
Luisa rápidamente le llevo las manos al cuello a Anthony tratando de acercarse lo mas que pudiera, mientras fingia parecer mas débil y por lo cual necesitara acercarse mas a el para no caer, Luisa fingió un desmayo por lo que Anthony le sujeto la cara, hablándole para que ella reaccionara.
-¡señorita! ¡Señorita! Vamos despierte.
Anthony se acerco tanto a Luisa que tenia a unos centímetros su rostro de ella, por lo que luisa de pronto despertó y lobeso apasionadamente, lo sujeto fuertemente evitando que pudiera zafarse del abrazo que tenían, estában demasiado cerca, parecía como si su cuerpo se había soldado al de Anthony.
Candy no podía creer lo que veía, no, se negaba a creerlo aunque ella misma lo estuviera contemplando, como Anthony había abrazado a la chica primero y luego la había besado tan apasionadamente, no podía ser, candy cerro los ojos, pero aun así veía a Anthony besando a otra chica, candy sintió que su corazón se rompió como la copa de cristal que sostenía en la mano, solo pudo dar la vuelta y salir corriendo.
Esta escena no solo la habia observado Candy, Eliza que había salido a la terraza habia visto todo al igual que Neal, ya que este no la perdía de vista, sonrió maliciosamente, al saber que Anthony estaba fuera de su camino, Candy por fin seria suya y aceptaría casarse con el, tambien la observo Miranda Elroy solo que no vio el momento en que Neal salió detrás de Candy.
Anthony se separo de luisa y la empujo ligeramente, se limpio la boca dándole la espalda a luisa.
-Lo siento Anthony no pude evitarlo tenerte tan cerca perturbo mis sentidos, discúlpame no volverá a pasar.
Diciendo eso se marcho Luisa, ya había realizado la primer parte de su trabajo y fue mucho mejor de lo que se había imaginado que seria besar a Anthony Brower, lo demás seria mucho mas fácil pero no igual de placentero.
Anthony estaba desconcertado no sabia que pensar, ese beso lo había tomado por sorpresa, pero no significaba nada, lo lamentaba pero el no lo había hecho intencionalmente por lo que esperaba que candy no se enterara y que llegara pronto. Anthony no sabía que candy había visto toda aquella escena.
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Después de meditarlo muchas veces Terry decidió presentarse en la casa Leagan por lo que tomo su saco de su traje y subió al carruaje, le pidió al chofer que lo dejara por la puerta de servicio, decidió que observaría un poco desde la distancia y juzgaría si valía la pena presentarse o no.
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Candy corrió a través del jardín con los trozos de su corazón en la manos, quería morir, no podía creer que la Anthony la hubiera engañado de esa manera, candy solo lloraba y corría sin dirección, por lo que no se dio cuenta de que alguien la seguía hasta que una mano la tomo del brazo y la hizo darse vuelta, era Neal Leagan el que estaba enfrente de ella y borracho para variar.
-candy ya ves te dije que Anthony no te quería, ahora no tienes pretextos para casarte conmigo.
-que si no tengo pretextos para casarme contigo? Aun si Anthony no me ama, yo a ti te desprecio, me das asco, de veras te aborrezco.
Todo esto que le dijo candy a Neal, de verdad lo sentía pero había sido demasiado dura al decírselo de esa manera, pero ella tenia tanto dolor que no pudo evitar que su forma de hablar reflejara el dolor que no solo sentia en su corazón ademas le dolía los ojos por lo que había visto, la boca por lo que acaba de decir, pero sobretodo le dolía el alma la cual tenia rota.
Las palabras de Candy hirieron el orgullo de Neal, por lo que este se enfureció y arremetió contra ella, la derribo contra el césped y se coloco contra ella.
-que me desprecias candy?, no habrá sentimiento en el mundo capaz de describir lo suficientemente que me vas a odiar después de que seas mi ramera, por que eso serás, quise que fueras mi esposa pero te negaste y ahora será lo que yo quiera que seas para mi, te humillare y vendrás a rogarme que te acepte pero no lo hare.
-basta Neal suéltame, suéltame me das asco, Albert, Stear, Anthony auxilio, !auxilio!
Neal la abofeteo una par de veces para que Candy se callara pero esto solo hacia que Candy llorara mas y gritara con mas fuerza.
-cállate, nadie te escuchara, estamos demasiado lejos, nadie vendrá, en vez de gritar disfruta lo que estoy por hacerte....
Neal dijo esto mientras subía el vestido de candy y le acariciaba las piernas, le besaba el cuello, rompió su vestido y besaba sus senos sobre el escote del corsé de una manera grosera y tosca.
Candy cuando escucho su vestido romperse y los sucios besos de Neal sobre su piel, grito con más fuerza que alguien la ayudara, con la garganta al rojo vivo y en las uñas rastros de la piel de Neal se creyo pérdida cuando de pronto Neal ya no estaba sobre ella, alguien se había compadecido de ella y la había salvado, candy trato de cubrir su cuerpo con las manos, cubrir su vergüenza, mientras no podia evitar dejar de llorar y gritar.
-hijo de perra, como te atreves.
Terry había salvado a Candy había escuchado a una mujer gritar cuando había entrado por la puerta trasera, por lo que apretó el paso y cuando estuvo mas cerca identifico que esa voz era la de candy por lo que corrió hacia donde provenían los gritos, sintió la furia recorrer su cuerpo al ver a aquel animal sobre ella, causandole daño, quería matarlo con sus propias manos, por lo que con una patada potente había quitado a Neal encima de ella, lo levanto de la solapas lo arrojo contra un árbol, lo golpeo varias veces hasta que el llanto de candy le recordó que ella estaba ahí asustada y herida, por lo que trato de acercarse a ella, pero ella rehusó que la tocara no quería que la viera, no quería que la tocara, Terry se acerco un poco mas y le hablo dulcemente.
-vamos candy estas a salvo, déjame llevarte a casa señorita pecas.
Con eso ultimo Candy sabia que su salvador era el mocoso malcriado, por lo que se arrojo a sus brazos, y lloro profusamente, Terry se quito la chaqueta y se la coloco encima de manera que la cubriera un poco mas, la estrecho a su pecho, la abrazo fuertemente hasta que ella se calmara un poco, cuando estuvo mejor la levanto en brazos y se dirigió a la casa Leagan necesita revisarla y saber que tanto había sido el daño que tenia.
-!Albert!
Ya estaba demasiado cerca de la terraza de la cual había huido candy y en ella estaba Albert buscando a Candy la cual en el momento en que se separo de ella, candy había desaparecido, ya lleva mas de 40 minutos y candy no regresaba, pensaba regresar al salón a buscarla, cuando escucho que alguien lo llamaba, se giro y de pronto vio a Terry que sostenía a Candy en brazos, por lo que Albert corrió a su encuentro y tomo a Candy en sus brazos.
-que le sucedió Terry?
-un maldito bastardo trato de tomarla por la fuerza
- que?
Candy se abrazo al cuerpo de Albert y sintió como el cuerpo de Albert se tensaba al escuchar lo que acaba de decir Terry, ella comenzó a llorar de nuevo, y solo pudo decir en pequeños susurros.
-Neal...... Neal...... Neal.
-maldito bastardo, lo matare, te juro que lo matare candy por lo que te hizo.
-eso puede esperar Albert, pero candy esta primero debemos sacarla de aquí, debemos curar sus heridas.
-tienes razón, entra Terry avisa a mi familia, que debemos irnos.
-yo no puedo hacer eso Albert si entro ahí no saldré nunca.
-por que no Terry?
-es difícil de explicar pero solo puedo decirte por ahorra que soy Terry Granchester, el invitado de honor entiendes?
Albert estaba realmente confundido no entendía nada de lo que decía Terry, por lo que le pidió que sostuviera y cuidara a Candy en lo que el iba por su familia.
-candy, vamos no te duermas, que te duele dime?
Candy solo movió la cabeza ante lo que Terry le acaba de preguntar era difícil decir que le dolía mas, el engaño de Anthony que habia hecho pedazos su corazón, o el ataque de Neal que había maltratado su cuerpo, pero en conjunto le dolía, el alma, el corazón, y las entrañas.
Terry estaba demasiado preocupado por Candy por lo que se impaciento y salió de la Casa Leagan, subió a un coche, y la llevo a su nuevo apartamento al cual se había mudado, ahí tenia todo lo necesario para curar sus heridas, pero antes le dijo al portero que le informara al joven Albert White que se iría a su apartamento que ahí lo buscara.
Cuando Albert informo a la tía abuela lo sucedido casi se desmaya, pero tenia que ser fuerte candy la necesitaba mas, Stear y Annie corrieron hacia donde se encontraba Candy y Terry, pero no podían encontrarlos ya se habían marchado. Salieron hacia la puerta donde a Albert le informaron lo que Terry había dicho, por lo que el subió a otro coche en compañía de la tía abuela hacia el apartamento de Terry, Albert sabia que Terry era doctor, por lo que cuidaría bien de Candy.
En otro coche Annie y Patricia lloraban desconsoladamente por lo sucedido con Candy, Stear y Archíe no podían creer lo que Neal había hecho, sino había llegado ese amigo de Albert, candy estaría perdida, trataban de contenerse por no bajar del carruaje y buscar a Neal Leagan para matarlo, debían cuidar de las chicas ya después harían algo para ajustar cuentas con Neal.
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Anthony después de lo sucedido con Luisa y de esperar un poco a Candy y ver que candy no se presentaba, suponiendo que no había podido librarse de su familia, decidió buscar una copa para quitarse un mal sabor que tenia en la boca, por lo que no vio lo que había sucedido con candy.
Continuara…..
Próximo capitulo entre la deshonra y el dolor.
Eso sino decido cambiarle el nombre a l próximo capitulo, aun no estoy segura del titulo.
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